viernes, julio 11, 2014

La Cocina Amish y este verano...

Llevo ya algunos años experimentando en la cocina. Busco recetas que luego cambio, transformo y acabo haciendo propias. Ser una cocinera autodidacta tiene sus desventajas, como el invertir mucho más tiempo en aprender. Equivocarte una y otra vez hasta conseguir aquello que tienes en la cabeza y quieres desarrollar, también te da la capacidad de improvisación necesaria en momentos críticos, o preguntarte el porqué de esto o aquello. Para mi, la cocina es mi laboratorio, y a pesar de que encontrar tiempo para experimentar entre casering y casering es complicado, intento siempre buscar ratitos para motivarme y seguir investigando y enriqueciendo mi cocina.

Llevo ya tiempo con ganas de elaborar recetas "Amish" y después del 20 de julio, fecha en la que termino esta excelente temporada, voy a dedicar algunas semanas para introducirme en esa cultura gastronómica.



Hasta hoy, sabía poco más que lo que sabe la mayoría de nosotros de estas comunidades, de origen germano o suizo y asentadas en EEUU,  Canadá  y Argentina (también hay una pequeña comunidad en Irlanda).

Viven alejados de las de las urbes y se rigen por unas normas propias establecidas por la iglesia Amish. Este conjunto de normas se llama Ordnung. Estas "reglas" pueden diferir entre las distintas comunidades en algunos aspectos, pero la prohibición del uso de la electricidad, teléfonos móviles o automóviles es común a todos ellos. Me ha llamado la atención que algunos grupos Amish tienen prohibido el uso de los botones, porque se relacionan con los militares, así que sujetan sus prendas con pinzas o ganchos. Los tirantes o el número de pliegues que puede tener un gorro son motivos de desavenencias entre aquellos que dictan las normas del Ordnung. Dependiendo de la edad, un hombre puede llevar barba o no, en algunas comunidades se las empiezan a dejar largas desde que les crece en la adolescencia, en otras, deben esperar a casarse para poder ver crecer pelo desde su barbilla. Las mujeres deben dejarse el pelo largo, según la Biblia, así debe ser...


Son muy estrictos con el cumplimento del Ordnung, ya que ello les permite que su comunidad no se desvanezca y perdure a lo largo de los años, aún y así, en la adolescencia, hay un período alrededor de los 16 años, llamado Rumspringa, en el que se permite a los adolescentes acercarse más al mundo exterior. Después de este período, y sólo en alguna de las comunidades, el adolescente puede decidir si quiere recibir el bautismo Amish o por el contrario, llevar una vida "normal" alejada de esta cultura.



Los Amish son una población rural, aunque poco a poco han ido también abriendo sus propios restaurantes, tiendas de patchwork o de muebles hechos por ellos.¡También construyen sus propias casas!

Y después de poneros un poco en contexto, podréis imaginar como es su cocina. Su vida alejada de la tecnología se ve reflejada totalmente en su manera de cocinar. Los alimentos que consumen no están tratados con pesticidas, son totalmente orgánicos y naturales. Amasan el pan a mano, y lo hornean en hornos que funcionan con gas o con aire producido por un surtidor de gasóleo. En unos días os enseñaré mis primeras andaduras con alguna de sus recetas. Atentos... Buen fin de semana!!!!